Capítulo 4

 Las calles estaban vacías, Jonathan pensó que encontrar el reloj era muy fácil, por lo que decidió ir a una tienda de relojes antiguos y preguntó por él. Un anciano le dijo que fuera a la sinagoga, y que preguntara por Nico, que era la única persona que había llegado, a acercarse a ellos ,los poseedores del reloj. Nico le atendió agradado hasta que nombró el reloj. Nico pensó que Jonathan era uno de ellos por lo que le dio un medallón y salió corriendo dejando a Jonathan solo, siendo observado por ellos que sabían todos sus movimientos

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