Resúmenes el coleccionista de relojes extraordinarios

  Ellos soltaron a los perros, Emma y Jonathan fueron perseguidos por toda la ciudad hasta que les pillo uno de los perros. Jonathan despertó mareado y se encontró con una mujer de blanco que le decía que era una Soñadora y que esto no era real, Jonathan la dejó tranquila y buscó a Emma.  El señor Hadley buscaba en la ciudad Antigua el reloj.

Jonathan llevaba rato dando vueltas por la Ciudad Oculta, hasta que observo una tienda donde entro para preguntar por el ansiado reloj que buscaba, dentro encontró todo tipo de cachivaches extraños, de pronto se escuchó una voz y el chico observo a un pequeño duende al cual Jonathan le hizo varias preguntas sobre todo lo que estaba viviendo. De mientras el Seños Hadley se encontraba en la jefatura de policía de la Ciudad Antigua montando un escándalo, hasta que de pronto un gato le dejo un medallón que al cogerlo todo lo de su alrededor cambió.

Jonathan seguía sin rumbo por las calles de la ciudad, de pronto escucho una voz que le resultaba familiar, se asomó por una callejuela y vio a Emma, pero junto a ella se encontraban dos perros que lo miraban fijamente, finalmente los perros se abalanzaron sobre el chico, pero logró escapar de ellos. Ya en la Ciudad Antigua se encontró a Nadie que necesitaba ayuda para volver a la ciudad oculta, ya que la muerte le perseguía y el seguía escapando de ella, los chicos decidieron volver a la vez, pero de pronto apareció un perro así que Jonathan volvió y vio el cuerpo sin vida de Nadie y vio como la muerte se lo llevaba. Mientras el marques miraba desde su orbe todo lo que hacía Jonathan.

  Jonathan continuaba de nuevo por las calles de aquella ciudad, oyó una voz que provenía de un hombre que le empezaba a contar historias que desconectaba a Jonathan del mundo real, entonces el entendió que se trataba del hacedor de historias del que tanto le hablaba Emma, pero de pronto escucho unos aullidos acercándose y decidido huir, pero se encontró con su padre Bill y decidieron ponerse a refugio. Estaban caminando y se encontraron a Emma y Jonathan descubrió que ella no era humana y que se trataba de otra persona como el marques y que ella lo que hacía era alejar a Jonathan de su objetivo final. Mientras el marques observaba a Jonathan y su padre viendo cómo se les agotaba el tiempo.  

Jonathan y su padre estaban refugiados de los perros en un sótano, Bill aprovecho para preguntarle a su hijo que estaba pasando y el le conto todo, al final Jonathan decidió que alguno de los dos debería estar en el otro mundo cuidando de Marjoire así que su padre se fue. De pronto Jonathan escuchó unos pasos que provenían de arriba y decidió subir, arriba se encontraba un hombre que se hacia llamar el contador de estrellas, Jonathan quiso hacerle unas preguntas que el hombre le respondió amablemente, hasta que se tuvieron que ir porque Emma les aviso de que les estaban esperando.

Jonathan se encontraba en un juicio junto a el contador de estrellas, Emma y otros inmortales. Ellos habían convocado el juicio con el fin de hacerle saber a Jonathan todo esto que estaba pasando y toda la historia real del Marques que él le estaba ocultando para que el chico consiguiera el reloj y así el Marques consiguiera acabar con todo el universo, de pronto todos observaron la puerta y vieron entran a un chico llamado Jeremiah.

Jonathan, su padre, Emma y todos los inmortales se dirigían hacia el museo de relojes donde habitaba el Marques, allí el Marques decidió volver a desafiar a Jeremiah ya que tenía una segunda oportunidad, esta vez el desafío consistía en un combate mental, que estuvo muy reñido ya que en momentos ganaba Jeremiah y en otros el marqués, pero finalmente Jeremiah fue el vencedor y obligaron al marques a meter su alma en el reloj Qu Sui

Jonathan ya estaba en el avión junto a su padre y su madrastra para regresar a casa, durante el viaje Jonathan recordó todos los momentos que el paso y que pensaba que eran sueños, pero él sabía que realmente lo había vivido, extrañara a Emma y a todos los demás inmortales. Al revisar sus bolsillos se encontró con que el contador de estrellas le dejo un reloj-puerta en él.